Hoy tengo ganas de enseñarles este quilt que hice hace cuatro o cinco años. Este trabajo estuvo tutelado en su desarrollo por la que fue mi profesora en aquel entonces, Rosa Cruz en Fildor de Las Palmas. Si les digo la verdad no recuerdo como se llamaba la técnica. Lo tengo apuntado en una libreta de cuando estaba en clases, pero por más que la he buscado, nada de nada, no tengo ni idea de donde la he puesto. Si alguna sabe como se llama, por favor que me refresque la memoria.
Me gusta mucho este quilt, pero la verdad es que no queda muy bien en mi cuarto porque tengo el cabecero forrado y no le va para nada. Aun así me gusta ponerlo de vez en cuando como si fuera un faldón encima de la colcha beig que tengo.
Lo pongo de vez en cuando doblado porque me gusta usarlo. Cuando decidí ponerle estas telas, la verdad no pensaba en usarlo en mi cuarto, simplemente lo hice y punto.
La técnica en cuestión requiere el uso de 12 telas diferentes de dos colores que contrasten. Yo elegí 6 con fondo beig y otras 6 con fondo oscuro. Se usa un trozo de papel freezer para cortar a la vez las doce piezas de tela a la vez y luego de forma ordenada se van alternando los trozos de forma que nos quedamos con 12 cuadrados con 12 trapecios en su interior.
Lo se, lo se, vaya rollo que les acabo de soltar pero es que esto sin fotos o sin un tutorial es muy complicado de explicar pero claro en aquella época no sabía lo que era un blog (bueno si es que existían, que tampoco lo se)
Luego lo acolché después de hacer un curso de acolchado con mi Bernina con Ana Gallardo de "El Vuelo de la Oca" cuando tenía la primera tienda en Tafira Baja.
No se fijen mucho porfa que se nota los puntitos blancos debido a la tensión del hilo, pero les digo que fue el primer trabajo grande que acolché a máquina.
Aquí les pongo un par de fotos de la trasera en donde se ve mejor el acolchado. Por los bordes está bastante acolchado.
En el cuerpo central, los doce bloques solo están acolchados por la costura.
Aquí está extendida la colcha sobre la cama. Las medidas del quilt completo son más de dos metros de alto y ancho.
Me gusta tanto este y otros trabajos que tengo hechos o por terminar que estoy casi decidida en cambiar mi cabecero y poner uno de hierro forjado para poder dejar la colcha beig de fondo y darle color a la habitación con los distintos quilt. ¿No creen que es una buena idea?
Y aquí les muestro un par de fotos más para que lo vean. Es muy bonito o por lo menos a mi me lo parece.
Cuando cambie el cabecero sacaré otra foto y la publicaré para que vean como va a quedar mucho más bonito el cuarto.
Espero que les haya gustado.
Una cosa más, mañana y pasado asistiré a un curso de Teresa Sako en Fildor en Las Palmas. Estoy loca de contenta, así que voy a preparar los útiles para que no me falte nada. Espero poder enseñarles mañana o pasado lo que hemos hecho y como lo hemos pasado.
Besitos, buen fin de semana y hasta la próxima entrada. Elena.
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